Estoy muy ocupada terminando la redacción de mi tercer libro y por eso aparezco poco por aquí. Pero hoy decidí escribir un episodio de la "saga" del Dr.Lucas Scott.. Espero les guste!
El Dr.Lucas Scott y su paciente más
joven.
Como siempre Lucy le trajo su taza de té y
se pusieron a conversar sobre los pacientes que tenía para atender. Esta mañana
venía una paciente derivada de un colega, de solo 13 años. El Dr.Scott estaba
preocupado por los datos que le habían dado de la misma. Se movilizaba en silla
de ruedas, aunque no estaba paralítica, pero perdía el equilibrio.
A las 10 en punto llegó empujada por su
madre. Lucas se sorprendió de ver una pequeña tan jovial y se puso a conversar
con ella. Antes de su problema de salud había empezado a patinar sobre hielo y
le encantaba. Le preguntaba si él podría lograr que volviera a hacerlo. El Dr.
Le pidió que no se apresurara que iban a ir paso a paso. La internaron para hacer
los estudios necesarios para la evaluación.
Al tercer día se acercó a la paciente y a
su madre para informarle qué iba a hacer de acuerdo al resultado de los
estudios. La iban a preparar para hacerle una operación de cerebro en los
próximos días. Esta operación era muy delicada y no podía dar ninguna garantía.
Lo que si le prometió que iba a hacer el máximo de su capacidad para que todo
saliera bien. La pequeña, con una sonrisa dijo que confiaba en él.
En los días siguientes Lucy vio a su amado
Lucas, muy preocupado y silencioso. Repasaba libros, veía los estudios de la
paciente hasta altas horas de la noche.
Al fin llegó el día…después de preparar a la
niña, entró el Dr.Scott al quirófano y empezó la operación. Fueron muchas horas
de una dedicada labor y al fin terminó todo con una gran aprobación de todos
los que lo rodeaban y que lo admiraban. La niña pasó a una sala especial de
alta complejidad. La medicaron para que no se despertara hasta el día
siguiente.
Esa noche, Lucas se durmió en los brazos de
Lucy, completamente agotado.
Al día siguiente, cuando le avisaron que la
niña estaba despertando, Lucas fue en seguida a verla. Le miró la carita y ella
al verlo le regaló una tímida sonrisa. Empezó a hacerle distintas pruebas para
ver su estado y todo dio bien. Habría que esperar unos días para que se pudiera
levantar para ver como estaba su equilibrio.
A la semana siguiente, le dieron permiso
para levantarse y de la mano del Dr. empezó a dar sus primeros pasos Primero se tambaleó pero eso era normal por
su debilidad. Después de dar algunos pasos más con bastante estabilidad, le
ordenaron volver a la cama. En los próximos días debía debía hacer lo mismo.
Poco a poco empezó a caminar sola sin
problema. Al fin le dieron el alta pero no debía apresurarse en su comienzo de
patinaje y eso si para hacerlo, debía usar un casco. Al saber esto, le dio un
gran abrazo al Dr.Scott que se emocionó mucho. Se sentía aliviado pues había
mejorado la salud de una jovencita para que siguiera el curso de su vida.
Ese día volvió feliz a su casa junto a
Lucy.
8 comentarios:
Ojalá existieran muchos Dr Scott, con esa responsabilidad y excelente maestría...Hermoso cuento, amiga, Felicitaciones.
Hola Graciela, gracias por tu comentario!
Besotes
Eliane:
Que hermoso y esperanzador relato¡
Muchos Dr. Scott tendrìan que seguir su ejemplo.
Besos millones querida amiga
Norma Ruiz: Gracias por tu bello comentario.Ojala nos podamos encontrar en algún momento!
Muchos besos!
Así deberían ser todos los médicos. Y tener novias llamadas Lucy :P
Besos
Luciana:Ojala la Lucy de Santa Fe que conozco consiga un novio médico así!!!Te lo deseo!
Un gran abrazo amiga mia!
Hola, paso a demás de a leerte a decirte que eres el blog que recomiendo visitar en mi post de hoy, puedes verlo si te apetece en
http://www.laporteriadenela.com/2013/04/ser-guapo-en-arabia-saudi-es-pecado_28.html
Besos
Nela
Nela muchas gracias por recomendar mi blog y por tu comentario!
Besotes
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